Día del Patrimonio

Este Domingo 25 de Mayo fue el Día del Patrimonio.

Y cumpliendo con mi deber de Madre Culturizadora y después de haber leído el evangelio con la Chini para su clase de catequesis de hoy lunes y de haber estudiado Inglés con la Monse (retomando el apoyo full en sus estudios para mi chanchita poinc). Y después de almorzar la rica pizza SuperMegaExquisita que preparó el papi. Logramos salir de la casa pasadas las dos de la tarde (uff!)

El itinerario era el siguiente:

Museo de Historia Natural - Ascensor Espíritu Santo - Museo Cielo Abierto

Simple, sencillo y cortito!
Qué más?

Y más encima, nos íbamos a juntar en el primer Museo con el Fran, la Clau y Renatichi para hacer un paseo en familia.

Y bueno, al final arribamos al Museo de Historia Natural pelando las 3 de la tarde:

La cosa es que a la Madre Culturizadora, se le olvidó que había leído que los Museos atendían sólo hasta las 16:00 Horas, así es que no voy a decir que nos faltó tiempo para revisar el Museo porque habían sólo algunas salas disponibles para el acceso del público, no todas estaban disponibles y no quiero pensar que la razón era porque era gratis mmmm ¡Qué Feo!
Pero no hubo tiempo para segundas vueltas, como que anduvimos justos, justos para que las niñitas miraran, aprendieran y hasta admiraran y para que la Madre Culturizadora dejara el asco de lado no más con algunas cosas museísticas y sacara fotitos como enferma.
Ni siquiera vimos a la Tortuga Gigante!!! Pero, al menos, nos dejaron ver LA Momia Chinchorra :-) pero SIN CÁMARAS! :-(

Pero, no importa, nos quedamos hasta que nos echaron y luego continuamos con el Paseo Cultural hacia el Ascensor en mente, así es que doblamos en la esquina y llegamos a las puertas del Ascensor Espíritu Santo.
Puertas que se encontraban cerradas... desde hace 7 años (según nos contó un cuidador de autos que amablemente nos instruyó sobre el tema cuál guía turístico).
Nuevamente, la Madre Culturizadora no había chequeado correctamente que el ascensor en cuestión aún no ha sido restaurado ¡cueck!
Para que les digo, la carita del Padre Culturizador cuando les digo: "A subir las escalas entonces" para poder contemplar el Museo A Cielo Abierto (MACA).

La verdad es que eran casi 300 peldaños, 251 para ser exactos, la Mane los fue contando 1 a 1.
Y se supone que este Museo a Cielo Abierto se remonta a 1969, cuando un grupo de alumnos de la Escuela de Artes de la Universidad Católica, encabezados por el profesor Francisco Méndez, decidieron pintar sobre los muros de las casas y las murallas de contención del cerro Bellavista grandes obras de corte abstracto. Creado oficialmente oficialmente como Museo en 1992, cuenta con 20 murales de gran tamaño, ideados por artistas nacionales, algunos de fama mundial como Roberto Matta, Nemesio Antúnez y José Balmes.
(Esto lo sé porque mi Bro, cuando estudió en la Cato, más de una vez tuvo que ir a retocar los murales por esos ramos electivos que uno tiene que tomar para completar créditos JA!).

Bueno, la cosa es que, no sé si la Madre Culturizadora se anduvo perdiendo o soy corta de vista pero la verdad, verdad, sólo encontré 2  de los 20 Murales.
El primero que vi fue el de la Artista Matilde Pérez.

Y el segundo, el de Eduardo Vilches, que está muy cerca del anterior (Y no tiene Cartelito, de suerte le saqué foto).

También encontramos estos 3 asientos de con mosaicos muy lindos que incluían una ballena, un barco y un bosque frente al Mar y, desde el frente, se podía ver un pulpo naranja, de autor desconocido y todos grafiteados.

Ah! y este otro mural que estaba en la espalda de un edificio, pero no sé si cuentan estos 2 últimos...
Me parece que no...

Los otros 18, nunca supe donde estaban... cueck! Y no me dejaron buscarlos!!!

Lo que sí encontramos en calle Héctor Calvo con el Paseo Pasteur que era el nombre del pasaje-escalera por donde subimos, fueron estos hermosos faroles forrados artísticamente con botellas de vino, cerámicas y muchos, pero muchos colores.
Bellos, Bellos.
Las niñitas los amaron!!!

Y bueno, en eso estábamos cuando el tío Fran dio señales de vida, había llegado al Puerto y nos esperaban en Plaza Aníbal Pinto, así es que cualquier intento de la Madre Culturizadora por subir y/o bajar por la calle Héctor Calvo en la búsqueda de más murales o, simplemente, conocer más el Cerro Bellavista, se fueron directamente a San Google hoy en la mañana jajaja.
Y comenzamos el descenso...

La bajada fue livianita, llegamos abajo en un tris!
Y en Plaza Aníbal Pinto nos encontramos con el Fran, la Clau y Renatichi, no sin que antes, las niñitas tiraran una moneda a la Pileta de Poseidón pidiendo un deseo.
Ricas!

Y acá viene la segunda patita señores!!!
Subimos por Calle Cummings y sus tiendas de antigüedades y llegamos al Ascensor Reina Victoria. Todos Arriba, el tío paga!!!

Una vez arriba, la vista con el día helado pero hermoso, era

¡es-pec-ta-cu-lar!

El Paseo Dimalow es tan lindo y desde allí se pueden ver muchas conexiones de calles de nuestro Puerto querido.

Obvio que ya las niñitas ladraban de hambre con tanta caminata.
La pobre Mane veía panqueques con manjar por todos lados, así es que hicimos una parada a tomar oncesita en el Café regalón "Café con Letras", ubicado en Almirante Montt a una cuadra de la salida del Paseo Dimalow.

Y con las energías renovadas y ya oscureciendo aunque eran recién las 6 de la tarde, comenzó el recorrido por los Paseo Atkinson y Paseo Gervasoni del Cerro Concepción. Y una que otra tiendita-boutique que aprovechamos de luquear con mi cuñá.

Y, luego, de subir y bajar cuestas terminamos en el Paseo Yugoslavo del Cerro Alegre, donde volvimos a la realidad y dimos por terminado el tremendo paseo, bajando al plan por el Ascensor El Peral.

¡Feliz Día del Patrimonio!